Recuperación del prepucio con PeniMaster (no con PeniMaster PRO)
Por qué los hombres desean volver a tener el prepucio
La extirpación (también parcial) del prepucio del pene tiene lugar, por lo general, por cuestiones culturales y religiosas o médicas. La circuncisión se realiza a menudo durante la infancia sin el consentimiento explícito del afectado. Algunos hombres desean volver a tener el prepucio que se les ha extirpado por cuestiones estéticas, por no sentirse "completos" o también porque la sensibilidad del glande disminuye si no se tiene el prepucio que lo proteja del contacto directo con los textiles.
Estiramiento de la piel para recuperar el prepucio
Las posibilidades no quirúrgicas para restituir el prepucio se basan en su totalidad en el estiramiento a largo plazo de la piel del pene desde el cuerpo en dirección al glande.
Para ello, la correa de sujeción de PeniMaster se fija alrededor del pene a una distancia de unos centímetros respecto del glande. A continuación, se ejerce fuerza de tracción sobre el pene y por extensión sobre la piel, que se estira de forma desproporcionada y que, como consecuencia, se puede alargar. Éste es un proceso que dura meses.
PeniMaster no se ha desarrollado especialmente para alargar el prepucio. Con el paso de los años, los usuarios han descrito el efecto del alargamiento del prepucio mediante esta técnica de colocación de la correa de sujeción como una posibilidad de éxito para combinar el alargamiento del pene con el alargamiento del prepucio. Si está prevista una reconstrucción quirúrgica del prepucio, la aplicación preparatoria a largo plazo del PeniMaster puede contribuir a mejorar el resultado que se puede obtener de la intervención.
Por cuestiones constructivas, no se puede conseguir el alargamiento del prepucio con el PeniMaster PRO, ya que su unidad de fijación sólo abarca el glande del pene y no la piel del cuerpo del pene en sí.
Las propiedades sensoriales del prepucio naturales y del frenillo extirpado por circuncisión no se pueden restituir de forma adecuada con ningún procedimiento. Ante todo, la recuperación del prepucio es un efecto estético que, no obstante, conlleva a la nueva sensibilización del glande deseada en la mayoría de los casos.